lunes, 20 de diciembre de 2010

Gerhard Lauck, "El Próximo Cuarto de Siglo y más Allá".



El Próximo Cuarto de Siglo y más Allá
 Gerhard Lauck
(Traducido por Bucelario)
Nuestro recurso más preciado es el hombre.
Un hombre desarmado puede pelear con los puños desnudos. Pero un arma no es más que un trozo de materia inútil sin el hombre que la maneje.
Un hombre desarmado puede crear su propia arma. Pero un arma no puede crear la mano que la use.
Hemos de poner especial énfasis en el perfeccionamiento de nuestros recursos humanos: el reclutamiento, fomento, utilización y multiplicación de activistas y partidarios. En segundo lugar, nuestro empeño ha de dirigirse a la mejora de nuestros recursos no-humanos (financieros, físicos y tecnológicos).
Debemos nutrir nuestras mentes y corazones por igual: nuestra herencia ideológica y el espíritu de lucha que sólo vive en el ideal nacionalsocialista. La vida significa esperanza en el futuro.
Una idea necesita personas. Esas personas son creyentes, seguidores, campeones, quienes abrazan la idea y difunden la palabra.
Las personas necesitan a otras personas. El hombre no es un animal solitario.
Los nacionalsocialistas forman una comunidad viviente. Una comunidad de fe y esfuerzo. Esta conciencia de comunidad, este sentido de propósito y este profundo sentido del deber de desafiar a todos los obstáculos y combatir a cada enemigo –a pesar de década tras década de despiadada persecución, difamación y sacrificio- es absolutamente esencial para nuestra supervivencia a largo plazo y victoria final.
Los individuos desaparecen. Las organizaciones vienen y van. Vecindarios y ciudades enteras son destruidos. Tal vez incluso naciones completas perezcan a lo largo del nuevo milenio.
¡Pero la Raza debe sobrevivir!
Esta realización, este mandamiento, es simultáneamente el más sagrado y natural.
¡Eso es la esencia del Nacional Socialismo!
Tal conocimiento, tal fe, tal deber es nuestra esencia como nacionalsocialistas.
El deber significa esfuerzo. El esfuerzo solamente produce resultados. El esfuerzo ha de ser reconocido, agradecido y, por ello, fomentado.
Hemos de poner énfasis en el activismo. Activismo mundial. El activismo de una comunidad nacionalsocialista de fe y esfuerzo, mundial y pan-aria.
Por supuesto que nada de esto es “nuevo”. Ya había dominado la estrategia del NSDAP/AO durante su primer cuarto de siglo y continúa haciéndolo en el segundo.
Organización, logística y tecnología son muy importantes, no nos equivoquemos al respecto. Pero no son más que el músculo de nuestro movimiento, no su corazón o alma.

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